domingo, 25 de agosto de 2013

Santa Rosa de Lima

Desde 1671, cada 30 de agosto los limeños se visten de fiesta para rendirle homenaje a la patrona de la ciudad: Santa Rosa de Lima.
Rosa de Santa María, como era conocida antes de su canonización, según sus seguidores ha concedido numerosos milagros que le han ganado devotos no sólo en el Perú sino también en otros lugares del mundo, hasta el punto de convertirse en patrona del Perú, América y las Filipinas.

Devoción:
La casa de Santa Rosa de Lima, conserva aún los lineamientos que tuvieron en el siglo XVI, época en que vivio Rosa. Es visitado anualmente por miles de devotos, peregrinos y turistas quienes recorren los ambientes que estuvieron ligados a su vida.

Aún se conservan como reliquias una ermita donde ella rezaba y un pozo de veinte metros de profundidad, donde sus devotos depositan sus deseos escritos.

La Basílica-Santuario, fue empezada luego de su canonización, con posteriores restauraciones durante los siglos XVII - XX hubo de ser remodelada e inaugurada finalmente el 24 de agosto de 1992, Este lugar es principal punto de peregrinación de todo el Perú y su arraigo popular es comparable a la Virgen de Guadalupe en México.

La figura de Santa Rosa de Lima se mantiene en el corazón del pueblo peruano como un símbolo de integración nacional.

Es Patrona de institutos policiales y armados: Policía Nacional de la República del Perú y de las Fuerzas Armadas de Argentina, de América y de las Filipinas.

 
Fiesta de Santa Rosa de Lima en el Perú :

Fiesta de Santa Rosa de Lima en el Perú:

En el Cusco:

En la ciudad del Cusco se efectúa ceremonia castrense, así como festejos religioso folklóricos en los distritos de Yanaoca y Quiquijana, en este ultimo hacen gala la danza “las capitanas” demostrando destreza y malabarismo.

En Cajamarca:

Actividad religiosa, fiesta patronal, feria comercial con venta de productos agrícolas y otras actividades sociales, en homenaje a la Santa Peruana.

En Ayacucho:

Se realiza una misa y novena en honor a Santa Rosa de Lima. Posteriormente, se procede con la quema de chamizas y una exposición de artesanía.

En Puno:

La festividad de Santa Rosa de Lima se celebra en la comunidad de Yanaque, con manifestaciones religiosas y danzas típicas.

En Apurimac:

Es celebrado mediante las procesiones de la imagen de Santa Rosa de Lima se realizan corridas de toros, fiestas populares y danzas costumbristas.

En Lambayeque:


Se celebra la fiesta patronal en homenaje a esta devota, se realizan diferentes actividades como bailes populares, quema de fuegos artificiales, espectáculos deportivos, etc

En Junín:

Fiesta religiosa con actos litúrgicos, procesión, feria, danzas y platos típicos. En Chongos Alto y Chongos Bajo se baila la Chonguinada. En Santa Rosa de Ocopa es Fiesta Patronal con corrida de toros.

miércoles, 21 de agosto de 2013

FELIZ DIA VIRGEN ASUNTA CALCA-CUSCO

El 15 de agosto, la ciudad de Calca celebra su día patronal bajo la advocación de la Virgen Asunta conforme señala el calendario religioso. Desde la época colonial la imagen de la Virgen Asunta se encuentra en Calca, su imagen llegó desde España en 1753 cuando Calca era una pequeña Villa. Según cuentan nuestros antepasados desde ese año es declarada patrona de la ciudad y su llegada coincide con el arribo de la imagen del Patrón Santiago al Distrito de Lamay.
LA ENTRADA: El día de la víspera el 14 de agosto, tiene lugar la llamada Entrada de la Fiesta. Se considera que es una reminiscencia simbólica en el tiempo del poder económico, principalmente de los afincados a la colonia y comienzo de la república. Una vez que fue establecida la advocación de la Virgen Asunta como patrona de Calca, era necesario darle brillo y la solemnidad correspondiente a la fiesta patronal. Para ello, los hacendados mostraban lo mejor de sus arneses briosos caballos de paso y con lo mas selecto de los trajes de la época, hacían su ingreso triunfal en Calca el día de la víspera, rindiendo de esta manera culto y veneración a la “Virgen Asunta”.
DIA CENTRAL: El día 15 de agosto es el día central que inicia con la misa de gallo, serenata a la Virgen con quema de cuetes y camaretazos. Una vez terminada la misa, sale de procesión el santísimo recorriendo las plazas, la virgen acompañada por una caravana de 14 santos encabezada por el niño Jesús de Praga. En esta festividad se aprecia danzas y comparsas que vienen dando mayor colorido a esta fiesta, convirtiéndola en una de las celebraciones más importantes del distrito. Por cuatro días consecutivos saldrá en procesión de la Virgen Asunta en su vistosa anda de plata obsequiada por el brigadier Mateo Pumacahua, prócer libertario de 1814, La hermosa escultura pertenece al artista Emilio Follana Camacho que plasmo su trabajo siguiendo las características de la Escuela Cusqueña, en reemplazo de la original que fue devorada por un incendio que se produjo en la capilla de Belén, a comienzos del presente siglo. La figura de la virgen representa a una mujer de 18 años, de bellísimo rostro, sonrosada y cautivante. Esta ataviada de las mejores prendas de vestir y de los más preciosos dijes que los devotos le han obsequiado. El último día, la Virgen Asunta imparte su bendición a la muchedumbre de fieles que repletan el atrio del templo.

"LA FIESTA DE AGOSTO"
En la ubérrima región de los andes del sur, en el departamento del Cusco, está ubicada la provincia de Calca situada en el corazón del Valle Sagrado de los Incas, en el piso ecológico qeswa, bañado por el Wilcamayo y el bullicioso Qochoq que cruza la población. Su nombre ancestral es K'allca, lugar pedregoso. Quedan vestigios de construcciones pre-incaicas hacia las laderas de LlipUeq y en la actual población, testimonio fehaciente de sus primitivos fundadores los Laris, Wallas y P'oques, o los más cercanos como los sawasiras y alqawisas. El tiempo ha transcurrido, la colonización ha llegado, ha sido destruida la cultura inca, se ha impuesto un nuevo nombre: Calca Antigua Villa de Zamora, los corregidores puka cuneas se hacen dueños de las pródigas tierras. Entonces K'ory Qoyllur, el Inca Urqo, la Sawasira y el Pitusiray se convierten en dioses de piedra. Ahora, en recuerdo a estos apus, en un escenario cerca del pueblo, se danza y se canta el Unu Urqo, (La fiesta de agua). En 1825, el 21 de junio, se crea la provincia de Calca por orden del Libertador don Simón Bolívar, siendo presidente del Consejo de Gobierno Don Hipólito Unanue.
Allí, en ese solitario paisaje, se entremezcló lo andino y español. En esa fusión de culturas, la occidental impuso sus creencias-,pero no acalló el espíritu andino, que pervive en la memoria colectiva, y da lugar al meta-mixtus, al sincretismo. En los agostos, cuando la pachamama abre su corazón, el viento desparrama las flores rojas del viejo pisonay, los loros (k'illichos) en coro anuncian la llegada del 15, día de la fiesta principal del pueblo, el santo de la Mamacha Asunta, como decimos los calqueños. El silencio de las plazas de Armas y Sóndor, de las calles Grau, Espinar, San Martín y otras, es quebrado por los huaynos sonoros de las bandas de q'aperos, que hacen despertar del letargo los días tranquilos, entre bombardas y cohetones que atemorizan la paz de los creyentes. Antes de la quincena, los runas y los mistis se juntan para armar los altares .Los arcos multicolores se alzan al cielo azul, con cuadros de pinturas populares, con telas de colores que juguetean al viento. Los runas, se apuran, beben cañazo con Nectarín y, a veces,cae alguien desde allá arriba, ¿será la ofrenda a la pacha mama? Aun cuando no fuera así, los altares se construyen entre músicas y chicha de jora, para que el 15 de agosto pase la Mamacha Asunta. Acompañada de un séquito de 14 santos que abren el camino de su recorrido. La mamacha Asunta, vestida cada día con un traje decorado con la más fina artesanía, sonreirá y alzará los brazos agradecida. La Virgen Asunta, bella, a veces seria y meditabunda; otras llorosa; algunas veces muy sonriente, pasea en su anda de plata donada en los tiempos de a colonia por el rebelde Mateo Pumacahua.
El prioste mayor, con su guión principal de orlas doradas, en cuyo lienzo de pana aparece la imagen de la Virgen Asunta; recorre por las calles anunciando de casa en casa la fiesta del pueblo, invitando a las misas principales y agradeciendo al mismo tiempo por las jurkas que los buenos amigos y vecinos han obsequiado. Los alterados menores reciben también los estandartes de la festividad. Las procesiones que duran tres días recorren las calles entre la gran multitud de feligreses. El Niño Jesús encabeza el acto procesional hasta llegar -al sitio de la Mamacha Belén, que anuncia el paso de la Patrona de Calca.De los valles de Lares y Laq'o habrá llegado ya ingente cantidad de espiguillas para rociarlas a la imagen de la Virgen en todo su recorrido.
Las ofrendas se cuelgan en postes separados, se adornan con k'intos, y penden productos de los fértiles valles, pequeñas saquillas de coca, de café, de caña de azúcar, yucas, poros, granadillas que, a manera de juego, se levantan y se bajan para que los niños y jóvenes calqueños cojan estos productos como regalo de las fiestas. Las Plazas de Sóndor y de Armas se llenarán de caramancheles (kioskos), nunca faltarán las cervezas, los ponches, los vinos y la chicha, los lechones, los asados torillos, las caldos de gallina, los panes de trigo, todo se consumirá al son de marineras y huaynos de lindas calquelinas que abatiendo sus pañuelos bajan por las rectas calles de Calca allí, juntos como nunca, los parroquias reirán y llorarán sus alegrías y sus penas, hablarán del futuro de sus hijos y de su pueblo; en silencio, le pedirán a la virgen la paz para los pueblos del mundo.
Llega el día central, es el 15 de agosto, el Pitusiray luce esplendoroso; apenas una humareda que llega de los valles envuelve a las montañas; es el día de la "entrada"; ya están la negra Anselma y el negro Tomás con sus atuendos; ella de mestiza con una gua gua tirada a la espalda, lisurienta y caprichosa, él, de cachaco de cuartel halando la muía cargada de productos y corriendo con el bullicio de las esquilas. Por las calles principales, los señores acompañan a la multitud en sus caballos enjaezados. Esa mañana se dejan escuchar muy de madrugada los atronadores camaretazos: es el albazo. Todos asistirán a la misa central; la Mamacha Asunta habrá despertado a las cuatro de la mañana y esperará a los fieles en el altar mayor, que manos de artista han decorado y llenado de flores y de cirios.
En un cielo lleno de estrellas en el parque irrumpen los fuegos artificiales uno tras otro: la guerra del avión y el buque, el payaso que orina fuego, los voladores y, especialmente, los castillos de dos, tres y hasta de cuatro pisos en cuya cumbre entre luces blancas se desenvuelve la imagen de la Mamacha.Surgen aplausos. La plaza se ha iluminado de colores. La pirotécnica profesional no ha terminado: sale apresurado el toro loco, bramando y echando fuego por sus narices; el torero huye de miedo entre las gentes; la fiesta está llegando al éxtasis. Los San Roques, vestidos de blanco como fantasmas que se elevan en el aire danzan y golpean con los poros en las cabezas de los espectadores, finalmente, se infilarán cantando el "amastuta purinkichu machu negrawan tupaspataj, uña negruta wacha cuwaj". La bendición es el tercer día.
Calca - Cusco - Perú.

martes, 13 de agosto de 2013

Taytacha de los Temblores Bendiceme y Ayudame!!!


Tradicionalmente se creía que la imagen fue donada por el Rey Carlos V de España, pero históricamente la obra data de alrededor de 1620, período del Rey Felipe II, quien escuchó los informes del arquitecto del Escorial, diciendo que los “indios del Perú seguían adorando al Sol y que es sus fiestas recordaban a las deidades de su gentilidad”. Al oír tal cosa, mandó hacer en Sevilla la imagen de un Santo Cristo de gran talla y belleza, pero distinto a los que veneran en España; éste debía tener color cobrizo y fracciones que les permitieran a los indios reconocerse en la propia imagen.
Concluida la obra, es enviada al Virreinato del Perú, asegurada en un arca y afianzada en la cubierta de una nave destinada a cruzar el mar y llegar al puerto del Callao, desde donde sería trasladada a la ciudad del Cusco.
Pero resulta que en alta mar, la embarcación sufrió amenazantes tormentas y los sacerdotes comisionados, en su desesperación, sacaron del baúl al Santo Cristo, lo aseguraron al trinquete mayor e imploraron piedad y clemencia para que detuviera la furia del mar y así fue. Se tranquilizaron las aguas y en agradecimiento le llamaron con el nombre de SEÑOR DE LAS TORMENTAS.
Una vez en el puerto del Callao, la imagen debía ser transportada al Cusco, encomendándose la tarea a un conocido arriero español afincado en la Villa de Mollepata (Anta – Cusco). Después de un viaje lleno de incidentes, arribaron al lugar de la última jornada antes de llegar a Cusco, este lugar fue el pueblo de Mollepata. La comitiva se detuvo para descansar unos días, pero al querer reiniciar el viaje sucedió algo inaudito, el arcón que contenía la imagen se tronó tan pesado que no pudieron ni moverlo. La gente dijo que era porque la imagen deseaba permanecer en ese lugar y la comitiva se vio obligada a dejarlo, no sin antes imponer como condición a los moradores que debían levantarle un templo. Por supuesto que todo fue una farsa del arriero cuya verdadera intención era quedarse con la imagen, de fina escultura y armónica anatomía y de la que se afirma es muy parecida al Señor de Burgos en España, por lo que es conocida como Señor Manuel de exaltación de Mollepata.
Así, para cumplir su compromiso, el arriero mandó hacer secretamente otra imagen, obra que fue encomendada a un imaginero indio de la zona y fue este otro Santo Cristo el que entregaron a la Catedral del Cusco. La escultura, de facciones grotescas y anatomía asimétrica, fue modelada en pergamino de llama, con el busto hueco y muy poco valor estético. Sin embargo, es admirada y querida por los pobladores de la ciudad de Cusco por sus portentosos milagros y fue así desde el momento que ingresó a la Catedral y le llamaron Cristo de la Buena Muerte.
A finales del mes de marzo de 1650 un terremoto asoló la ciudad. A un tiempo la gente sacó en procesión al Cristo negro, que hasta entonces estaba olvidado en su altar, y el movimiento fue detenido coincidentemente. Fue colocado en la puerta de la Catedral mirando a la ciudad con la creencia de aplacar las constantes repercusiones del sismo. Por éste evento fue bautizado como Señor de los Temblores.
En el año de 1720, la ciudad del Cusco fue asolada por una peste que sólo se detuvo después de sacar en procesión al Santo Cristo y es así como, por decisión del pueblo fue proclamado Patrón Jurado del Cusco, desplazando al Patrón Santiago que había sido nominado como tal por los españoles en 1646.
El Cristo está majestuosamente adornado con ñucchu . Los clavos de sus manos y de sus pies son de oro puro con incrustaciones de piedras preciosas, tenía una corona de oro puro con piedras que pesaba 1,3 kg, que en la década de 1980 fue robada. La que ahora usa es áurea también, pero es más liviana. Con el paso del tiempo se le añadieron en el altar las imágenes de la Virgen de los Dolores y San Juan Evangelista.
Cusco fue devastado con terremotos y sismos en varias oportunidades, se desplomaron templos y casonas, los fieles de inmediato tenían que correr a la catedral para sacar al Taytacha de los Temblores en procesión, desde 1650, 1950, 1986. Éste último para implorar misericordia y pedir perdón, porque creyeron que fue un castigo por el robo de la corona de oro (1985) que obsequió el Virrey Francisco de Borja y Aragón. En 1989 gracias a la gestión de Monseñor Mario Gálvez Tió, Vicario Capitular, y miembros de la Confraternidad, señores Jesús Lambarri, Concepción B. de Pola, Laura F. de Dueñas, Luzmila de Ochoa y Ricardo Castro Pinto, fue renovado y embellecido el altar del “Taytacha”, con hermosa platería y dorado en sus cornisas. El 9 de mayo del 2001, después de una solemne misa, los esposos Hilda Kalinowski y Luis Navarrete Lechuga donan al “Taytacha” dos hermosas coronas, una de oro y otra de plata, réplicas de la corona original que nunca fue recuperada. Recibió este obsequio el Monseñor Mayorga, y en representación de la Confraternidad, los señores Washington Peralta y Ricardo Castro Pinto.
Entre enero y marzo del año 2005, la Imagen del Señor de los Temblores fue restaurada por un equipo interdisciplinario del Instituto Nacional de Cultura (I.N.C.), hoy Ministerio Regional de Cultura, en los laboratorios de la Hacienda del Marqués de Valleumbroso, en Tipón del distrito de Oropesa, Departamento de Cusco, precisamente el 14 de enero el pueblo cusqueño rindió una emotiva despedida y acompañando entre lágrimas al patrón jurado. Con el rostro demacrado, que revela su grave enfermedad, el Señor de los Temblores dejó la Catedral, su Casa, en que durante varios siglos nunca salió; ésta vez lo hizo porque era urgente la delicada intervención, para después volver totalmente restablecido nuevamente a la Basílica Mayor para luego salir triunfante el Lunes Santo y bendecir a su pueblo.
Los maestros artistas restauradores hallaron dentro del cuerpo del “Señor de los Temblores” unas “Cartas” (en el Informe Final de Conservación-Restauración (INC, 2005, pp.11-12), hallazgo de 61 cartas de diferentes años, siendo el más antiguo del año 1762, Este conjunto de documentos corresponden a una vieja costumbre religiosa, la de escribirle cartas al santo, pidiendo favores, rogando su mediación, contándoles sus penas, quejas, rogándole conceda gracias a las que el creyente devoto no se siente capaz de alcanzar por esfuerzo propio. Al menos desde la restauración de 1977, las autoridades eclesiásticas conocían de la existencia de estas cartas, pero, optaron por dejarlas en el lugar donde fueron halladas.
Se preguntarán ¿por dónde introducían éstas cartas?, precisamente las hacían por la herida en el pecho “Llaga del Costado”, quizás el hecho de poner la comunicación dentro del cuerpo del Taytacha, cerca de su corazón, nos está indicando una necesidad de proximidad, de susurro de corazón a corazón, de sentimiento a sentimiento. El gesto y el lugar de colocar las cartas dentro del Taytacha, nos estaría hablando de una relación afectiva y fuerte, dice así una carta: “Ruegos al Señor de los Temblores, al Señor Don Manuel Jesús de la Palestina, Dios Trino y Uno, Justo Juez de Cielos y Tierra, como tú sabes bien yo sólo vivo en la esperanza tuya y la de la Madre María que también es mi Madre, a quien pediré si no es a ti. Las cosas que te pido son cinco en memoria de tus cinco preciosas llagas… (Ibid. Cuzco, octubre 30 de 1908, firma completa)”.
Quiénes serían los afortunados en introducir éstas cartas, cuándo, cómo y en qué momento?, simplemente no lo sabemos. Al analizar su composición se dieron cuenta de que el cuerpo no estaba hecho de pergamino o cuero de camélido como se creía, sino de fibra vegetal de lino. La cabeza es de maguey, mientras que los pies y las manos están hechos con madera balsa, materiales todos de nuestra región. Entonces el Patrón jurado, Taytacha de los Temblores, es autóctono y original.
En octubre de 2012, el Congreso de la República otorgó la medalla de honor en el grado de "Caballero" a la imagen del Señor de los Temblores, en una ceremonia realizada en la Catedral-Basílica de Cusco.

Procesiones

La procesión fue instituida el 31 de marzo de 1650, en recuerdo al terremoto, y en 1741 fue cambiada al día de Lunes Santo, marcando el inicio de la Semana Santa. Desde los balcones de las casas, que para esa época se adornan con dorados tapices, se arrojan los morados pétalos de una planta que crece por esa época en los campos: el ñucchu. El recorrido de la procesión sigue tal como se estableció en ese entonces. Sale de la Catedral, visita a la Iglesia de Santa Teresa, donde cambia su sudario para luego dirigirse a la Iglesia de la Merced, donde le espera la Virgen de la Soledad. En todo su recorrido recibe multitudinario homenaje y antes de ingresar nuevamente a su templo, bendice a sus fieles devotos. Según la creencia, durante la procesión del Lunes Santo, el peso de las andas es el peso de los pecados del que lo carga; y su rostro expresa cómo va a ser el año siguiente.
La festividad del Señor de los Temblores del Cusco fue declarado patrimonio cultural de la nación peruana el 28 de diciembre del 2007; esta declaratoria reconoce a esta festividad como un culto religioso que contribuyen a la identidad nacional peruana debido a la riqueza de los elementos que conforman esta tradición religiosa.5
El último domingo de octubre se celebra su fiesta patronal. Inicialmente su fiesta litúrgica fue señalada el 14 de septiembre (Día de la Exaltación de la Cruz) y el año de 1924 es cambiada al último domingo del mes de octubre (Día de Cristo Rey). Para estas fechas, se traslada a la venerada imagen al Altar Mayor, dejando dispuesto el Retablo del Taytacha para su limpieza y mantenimiento. El Cristo preside la Santa Eucaristía a él dedicada, y permanece en el Altar Mayor de la Catedral hasta concluir sus celebraciones patronales.